Con el reconocimiento en 2025 de Biodanza Burgos, son ya 35 las Start-ups de la Universidad de Burgos
Que el movimiento es clave para gozar de buena salud es algo ampliamente reconocido. Pero no todas las maneras de moverse son válidas si se buscan obtener ciertos beneficios. Así lo cuenta Carmen Cuartango Carrera, educadora social, profesora en el Grado de Educación Social en la UBU y emprendedora al mando del proyecto empresarial Biodanza Burgos.
Un proyecto que surge con la intención de dar respuesta a las necesidades de aprendizaje individual y de grupo, integrando a la persona a nivel conceptual, emocional, motor y existencial a través del Sistema Internacional de Biodanza. Una innovadora metodología de intervención por medio de la música, el movimiento y el grupo. “El ser humano es un ser biopsicosocial: no se trata de dar una respuesta exclusivamente conceptual sino de integrar toda la complejidad del ser humano en los procesos de aprendizaje y desarrollo”, comenta Cuartango, quien por el momento es la única facilitadora del Sistema Biodanza Oficial SRT en Burgos.
La Biodanza es un sistema concreto de aprendizaje y reaprendizaje del movimiento corporal como un idioma nuevo. El cuerpo es nuestro gran aliado. Tiene beneficios en la salud, al trabajar la armonización del sistema nervioso, en la expresión de la identidad, en la inteligencia afectiva y de vínculo, identificando los marcadores somáticos y utilizando el movimiento corporal como fuente de conocimiento y generador de sinapsis neuronal. Actualmente, según comenta la emprendedora, la Biodanza SRT es “la única metodología educativa que integra los avances científicos de neurociencia, los aspectos antropológicos, psicológicos y filosóficos a través de la música, el movimiento y el grupo humano. En síntesis, el Sistema Biodanza integra ciencia, arte y educación”.
Cuartango comenzó su andadura hace algo más de cuatro años, trabajando con grupos regulares. Gracias al boca a boca, su trabajo de difusión en redes, la presentación de dosieres informativos o su página web comenzaron otro tipo de colaboraciones con otras entidades como la Diputación de Burgos, la Fundación Caja de Burgos, el instituto vasco Lanbide o la propia UBU, a través de diferentes programas para sectores y perfiles variados.
Entre los planes de la emprendedora está el de abrir la primera Escuela de Profesionales de Biodanza de Castilla y León, para lo que se está formando como Didacta Internacional del Sistema Biodanza, además de continuar ampliando grupos y servicios a otras entidades sociales.
“Nunca había pensado emprender”, fue una decisión que surgió de la necesidad detectada en el ámbito educativo y social de trabajar de una manera integral y efectiva, comenta. A pesar de los desafíos personales y profesionales que supuso tomar esta decisión, Cuartango confirma que ha encontrado servicios de apoyo para sacar adelante el proyecto. “En los inicios tienes que aprender a hacer muchas tareas que rodean la propia actividad que nunca habías contemplado previamente, te sientes mujer orquesta”, asegura.
A todos los que estén pensando en lanzar su propio proyecto, Carmen Cuartango les insta a “ser fieles a uno mismo y caminar cada paso lleno de sentido, sin olvidar cuidarse y priorizar su bienestar para poder saborear el camino. Emprender es el arte de encontrar las cantidades exactas entre mente, corazón y acción” relata y confiesa, también, que “la satisfacción de ver como tu trabajo llega a las personas, las transforma y contribuye a un mundo más humano y más lleno de salud, de vida y de danza, hace que cada mañana me levante entusiasmada”.
UBUemprende, apoyo al emprendimiento universitario
La Universidad de Burgos, a través de la Oficina de Transferencia de los Resultados de la Investigación y de la Oficina de Transferencia del Conocimiento (OTRI-OTC), gestiona el programa de fomento del emprendimiento UBUemprende. Se trata de una iniciativa puesta en marcha en 2008 con la intención de apoyar a todos aquellos miembros de la comunidad universitaria que quieran validar y explorar la viabilidad comercial de su idea o proyecto, así como impulsar el espíritu emprendedor entre alumnos e investigadores a través de convocatorias regulares y actividades formativas.
Actualmente, ya son 35 las empresas que han sido reconocidas como startups de la Universidad de Burgos, una lista que continúa creciendo gracias al interés de los emprendedores en obtener este reconocimiento por parte de la institución como respaldo a su proyecto.